Llevo todo el verano escuchando a bastantes agricultores que les iban contando que no había mosca en nuestros olivares, que la cantidad que había no era considerable y que tan sólo hizo falta hacer un tratamiento mediante parcheo a primeros del mes de agosto, pues fue el momento en el parece ser se superó el umbral, que marcó que había que parchear contra la mosca.
Las teóricas, de gente falta de conocimientos y experiencia, están muy bien; pero os voy a mostrar mediante fotos lo que les ha sucedido a los agricultores de olivos hojiblancos que han seguido esos consejos:
En olivos hojiblancos, a día de hoy (festividad de San Miguel), se pueden coger aceitunas picadas de mosca a puñados.
Hay olivos hojiblancos, en los cuales, me atrevo a aforar que la mitad de su cosecha está dañada. No hay más que mirar las fotos que adjunto.
Parte de estos frutos dañados, ya están en el suelo. La aceituna hojiblanca, que no se caiga y esté dañada, se notará en el incremento de la acidez de las de vuelo. Pero por ser gordas y tener grandes daños, la mayoría caerá al suelo.
No todos los olivares hojiblancos de la zona están dañados, habrá que pedirle a sus cuidadores la receta, pero ya será para otra cosecha, no para esta.
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